Dalai Lama.
Quizás la imagen que tenemos del ser humano se vea a menudo distorsionada por el bombardeo informativo incesante y la contaminación mediática a través de la cual observamos continuos conflictos ( ya sean sociales, políticos o económicos) actos de violencia extrema ( sea individual o colectiva, con motivo racial o de género) y corrupción.
Pareciera que el ser humano es un peligro para su propia raza, una amenaza para el equilibrio del planeta en el que habita, y tal vez lo sea; pero lo cierto es que por cada noticia desesperanzadora , veo un gesto de bondad desinteresada ante mis ojos, por cada puñetazo sobre la mesa, cientos de abrazos, por cada político corrupto, hay decenas de ciudadanos trabajando codo a codo en una organización no lucrativa.
Hay una vieja historia de un indio Cherokee que dijo a su nieto " dentro de cada uno de nosotros hay una batalla de dos lobos. Uno es malvado, es la ira, el odio, el resentimiento, la inferioridad, las mentiras y el ego. El otro es benévolo. Es la paz, el amor, la esperanza,la empatía, la bondad y la verdad.
El niño pensó y pregunto ¿ y cual de los dos lobos gana? El anciano contestó " El que alimentas".
Cada día, en cada pequeña elección, está presente esta dicotomía, ambos caminos se bifurcan frente a nosotros.A cada momento tenemos la opción de reforzar nuestra alma, nuestra seguridad, nuestro camino por el bien, o de hundirnos en la mentira, el odio y sepultar el alma bajo el miedo.
Son momentos de crisis, dicen los medios, la solvencia del sistema está en tela de juicio, quizás nunca volvamos a vivir como hace unos años, a tener la riqueza y la prosperidad que con ingenuidad creíamos imperecedera. Son tiempos de cambio, es cierto, quizás sea el momento de perder la perspectiva material, de volver a una vida sencilla, de desechar la sociedad de consumo y recuperar al esencia humana.
Puede que el dinero domine los intereses políticos, quizás los mercados gobiernen el mundo, pero que no gobierne tu alma, que no domine tus actos. Busca más allá... dejemos de buscar felicidad en centros comerciales, dejemos de mirarnos en el espejo, dejemos de reclamar porcentajes, salva tu alma del egoísmo, de esta tiranía material, busca en lo mas profundo y auténticamente humano.
Tener un alma pura te hace libre. Tener un corazón libre te hace puro.Algo me dice que estos tiempos de crisis económica son los mas propicios para la búsqueda de la esencia del ser humano...
( Gracias Javier Valldeperez por la magnifica foto)
